lunes, 3 de julio de 2017

Un trabajo aventurero de fines de semana

A principio de año conseguí un trabajo de fines de semana como coordinadora de grupos en viajes de corto recorrido por México y, aunque empezó por necesidad, pronto terminó convirtiéndose en un pasatiempo.

En un inicio pensaba que sería desgastante: madrugar, el esfuerzo físico, sacrificar los fines de semana, momentos con familia y amigos, pero estos viajes han sido más gratificantes y enriquecedores de lo que pensé, pues incluyen visitas a lugares naturales y pueblos mágicos, así como experiencias gastronómicas, artísticas y culturales.

Cada fin de semana visito lugares que guardan miles de secretos, historias, leyendas, cuentos, disfruto de la naturaleza y sus rincones encantados, pruebo diferentes platillos, dulces, bebidas, conozco algún recinto histórico, platico con artesanos y gente local, conozco parte de la cultura y el arte de los pueblos, escucho música regional… la lista podría seguir.

Y, aunque parece que sólo es diversión, también está la parte del trabajo: ser guía y responsable de grupos de gente que van a conocer y disfrutar del tour. Cada recorrido, cada grupo es generador de aprendizaje: como tratar con los proveedores, resolver conflictos inesperados, llevar las cuentas de los gastos, manejar a grupos y hacerlos sentir seguros y en confianza.

En estos 5 meses he tenido la oportunidad de conocer a chavos emprendedores y muy trabajadores, quienes me brindan la oportunidad de laborar con ellos, así como compañeros de trabajo que se encargaron de entrenarme en mis primeros recorridos y con los que he compartido buenos días conociendo México.

Conocer, charlar y convivir con gente nueva, pasando días en compañía de compañeros de trabajo y clientes, hacen que la experiencia sea mejor, pues al final del día nos convertimos en una pequeña familia. Y bueno, puedo poner en práctica lo aprendido en los pocos cursos de fotografía que he tomado.

Mis viajes de fines de semana son todo un reto, pero, al final, la sonrisa y el agradecimiento de la gente, es la mayor recompensa. 

Me gusta trabajar con Espíritu Aventurero y viajar por México como forma de escapar a la realidad y sanar al alma. 

Kira



Dedicado al equipo de Espíritu Aventurero.
http://espirituaventurero.com.mx/